Vea el video o lea la transcripción del video, abajo.

Cuando termine de verlo o leerlo, haga clic en el botón “Next” (Siguiente), en la esquina inferior derecha.

Transcripción del video

"Al empezar el décimo grado me acosaron cibernéticamente y esta muchacha estaba poniendo comentarios anónimos sobre mis fotos diciendo lo feo y gordo que estaba y… era… ella me mandaba un texto de cómo me miraba en el pasillo y que no me miraba bien ese día o algo acerca de mi apariencia y siempre tenía un comentario sucio que decir. Siempre me da pena porque estoy gordo o porque soy muy grande. Es muy fácil mandar una foto de ti mismo y, tú sabes, puede que confíes en alguien, pero [ellos] al final no son confiables y aunque hablen a tus espaldas, tú sabes, sigue siendo acoso cibernético, duele, lastima. En una ocasión publiqué una foto, y lo que recibí fueron comentarios como …eres totalmente gay, tan gay que dije, “está bien” y luego siguieron comentando. Estaba en una videollamada (facetime) con ella, tal vez algo que no debería haber hecho. Y ella tomó una foto de mí y se la mandó a un montón de gente en mi escuela. Me sentí como, dolido al principio porque cuando alguien dice muchas cosas malas de ti. Aún te afecta a pesar de que te enseñan a no preocuparte por la opinión de alguien más. Comencé a preguntarme si debería mantener mis cuentas sociales porque toda esta negatividad es como si estuviera en ellas. El año pasado no quería ir a la escuela porque una persona estaba diciendo cosas en línea. Ni siquiera, este, quería salir. No quería pasar tiempo, este, con los amigos porque… porque pensaba que estaba, este, gordo y… así que, así es.”